UN ANÁLISIS SOCIAL, CON TOQUES DE  IRREVERENCIA.

Durante algunos años, que al parecer fueron muchos ,nos mantuvimos algo al margen de esta sociedad. Aun teniendo como residencia fija nuestro particular terruño, el hecho de laboral alrededor de diez  horas diarias en la zona franca San Pedro; nos aisló,de alguna forma u otra,de la cotidianidad que se vivía por estos predios. Mas el amor por quisqueya nunca disminuyó, todo lo contrario, siempre dimos seguimiento a eventos importantes en el área deportiva y social sobre todo los que tenían como escenario el municipio cabecera en donde estuve viviendo temporalmente.recuerdo con mucha alegría aquellos campeonatos de baloncesto ganados por nuestro equipo superior: LOS CORRE CAMINOS DE QUISQUEYA.¡Cuanto orgullo me generaba el escuchar a personas, ajenas a nuestro municipio, elogiar sin tapujos la calidad de nuestros jugadores! Igualmente en el béisbol doble A
Mas siempre he pensado que podemos dar mas que permanecen talentos ocultos a quienes por alguna u otra razón no se les ha permitido aflorar ha la palestra publica y  dar los frutos que su capacidad puede parir.
Hay ocasiones en que siento que sectores cuyo papel ha sido medrar, parasitariamente, de esta mi patria chica. Se oponen a que nuevos componentes accionen y participen de lo que ellos consideran un pastel y para llevar a cabo tan execrable acción no escatiman esfuerzo, egoísmos y mezquindades.
Me duele, cuando acierto a leer alguna anuncio en  la pared del local que ocupa la parada de guaguas junto al parque y encuentro garrafales faltas ortograficas sin importar si dicho anuncio pertenece a la dirección de uno de los centros de enseñanza que tenemos.Me duele cuando al asistir a alguna actividad me encuentro con que no se hizo el mas mínimo esfuerzo para organizar con inteligencia dicho evento. Me duele cuando siento que un grupo de mimos nos hallantan con sus pantomimas y nadie les enmienda la plana.Como si esta comunidad fuera un hato de cafres y no una sociedad civilizada.
A lo mejor soy nueva vez incomprendido por los que acierten a leer este articulo,mas ocurre tan frecuentemente que ya estoy acostumbrado pues carecemos hasta de capacidad para descodificar conceptos y nos perdemos con facilidad hurgando en las ramas obviando el tronco del asunto.En realidad a lo que refiero es a ese atraso que se advierte en nuestros notables en nuestras autoridades.Quienes estarían llamados a conducir a nuestra gente hasta los senderos del desarrollo mas parece que quienes están mas necesitados de dirección son ellos.
Me pregunto una y otra vez ¿Porque en consuelo,por ejemplo hay una casa de la cultura y aquí no?¿Porque San Jose de Llanos tiene una excelente escuela de musca y aquí no? ¿Porque hasta Ramo Santana cuenta con un hospital municipal y aquí no?¿Que nos falta para superar este bateyismo visceral que arrastramos sin rubor?
Honestamente no vislumbro un cambio,pues los actores sociales que pululan en estos momentos como entes decisorios y determinantes, carecen ellos mismo, de la calidad suficiente para general los cambios necesarios que conjuren esa vergonzante  tara.Mas bien, espero a que aquellos apocados y relegados surjan con valentía para ocupar, atendiendo a  designios insoslayables que les destina a las más cimeras posiciones de éste municipio.Sino ,estamos condenados a seguir por el mismo derrotero.
Tal vez ,ésta ancestral manera de ver las cosas viene heredada de nuestra herencia como pueblo fruto de la migración.Un amigo emigrante solía contar algunas anécdotas en tal sentido.  "Durante durante los primeros años de la industria cañera, nuestro ancestros venidos de las isla angloparlantes, se negaban a entrenar  los obreros en tareas que pusieran en peligro su estabilidad laboral.Por lo que acostumbraban a apartarlos  de su entorno cuando encontraban una falla;como forma y manera de impedir su crecimiento técnico". Ese, probablemente, sea el génesis de nuestro individualismo. Vemos como la tónica de estos tiempos es resolver,de manera particular, los problemas sociales que nos afectan. Por ejemplo, ante la falta de un servicio energético deficiente, la gente hace esfuerzo extraordinarios  para comprar un inversor e igualmente frente a la problemática del agua, instalamos una bomba extractora y ya. sin pensar ni siquiera por un instante, en la soluciona colectiva.
No crean que piense que con este humilde articulo voy a cambiar las cosas,claro que  no,pero al menos al igual que el colibrí de la fabula ,se que estoy haciendo mi parte.
Quedan pues ustedes advertidos. si no buscamos y fomentamos un nuevo liderazgo; uno que implante  nuevos criterios dentro de la sociedad en la que vivimos, nadie espere ningún tipo de direccionamiento diferente. No podemos esperar que un individuo que invierta diez millones de pesos en una campaña, para ser sindico, luego, no busque recuperar ese dinero. De una u otra forma, somos culpables todos, de ésta azarosa situación por la que atravesamos pues, consentimos, a cambio de migajas, con el sostenimiento de este tipo de conducta social tan perjudicial.Y definitivamente no actuamos en busqueda de superar nuestros antiguos lastres bateyanos.



Marino Santana