¿DONDE  ESTÁN NUESTROS PARADIGMAS?


Luego de escuchar, la ya famosa  llamada de el Sr. Quirino Ernesto Paulino castillo, cabe la pregunta que titula éste articulo y que repetiré sin titubeos: ¿Donde están nuestros paradigmas? Y digo que cabe pues, escuchar a un narcotraficante, confeso y condenado, expresar que no le gusta la política por sucia,eso es bastante grave.Una actividad que debería estar revestida de la mayor nobleza y miren en que situación se encuentra: rechazada inclusive por un individuo con semejante prontuario criminal.
Pero,esa es tan solo la punta del iceberg .Si se nos antojara echar un vistazo por otros estamentos de nuestra sociedad, nos encontramos con lo siguiente:
La poblacion, con sobradas razones, en vez de sentirse segura ante la presencia policial; al llegar la uniformada, encargada del orden publico, se llena ,no tan solo de temores, sino que recela de la real intención de sus ejecutorias, ante la gran cantidad de miembros, del mencionado cuerpo represivo,que se han involucrado con el crimen organizado.
Las instituciones anti-drogas se involucran en el sicariato y o en el comercio de la misma; al igual que otros estamentos de la administración publica  en donde, de cuando en vez, se descubren los mas escandalosos fraudes, y nadie resulta apresado. Pues, concomitantemente con la podredumbre conductual de nuestras autoridades,existe la impunidad como ominoso manto que cubre tales desafueros. Ademas, entra en éste plano unas de las mayores vergüenzas que corroe al estado: La lenidad de la justicia que, plagada de corruptos,se plantea como un mercado de sentencias, mas que el estamento encargado de impartirla.

Nadie confía ya en profesionales como los que paso a mencionar: Abogados, médicos, ingenieros, periodistas y otros.(De éstos últimos parte de los pocos serios que hay los queremos etiquetar, nada más y nada menos que, como traidores a la patria)

y esto debido a que en muchos casos en que tales profesionales actúan, usted se encuentra con mañoserias a granel; tomando en cuenta las excepciones de lugar,que siempre están presente.
Hablar ya de la falta de credibilidad que arropa a la clase política dominicana ,y se podría decir igual parecer de la clase política internacional ,seria llover sobre mojado.
Sabido es que,en este país, la mayoría la poblacion  a dejado de confiar en todo y en todos. Es como si  establecieran  un plan para despoblar al país de todos sus referentes morales. Ya nadie habla del mes de la patria;sino del mes del amor y del carnaval. El día de Duarte es un día para ir a la playa y tomar bebidas alcohólicas ,al igual que lo es la semana santa.
la mayor parte de nuestra juventud, no conoce de nuestros héroes nacionales. Nadie respeta nuestros símbolos patrios,más que una bandera, en algunas instituciones, parece que tienen izado un trapo viejo y descolorido.Y sino me creen, fijense en la que exhibe la fiscalia local.
Pero si hablamos del área municipal, ahí es que esa pintura es dura, a tal grado que una institución de la sociedad civil afirmó que si se auditan a todos los ayuntamientos del país el 90% de los ediles caerían presos, debido al alto grado de corrupción que caracteriza a esas dependencias.
Tal parece que nada sirve y que éste no fuera un país, sino un furunculo que por donde quiera que usted lo aprieta, lo que sale es pus.

Marino