¿QUE NOS QUIEREN DECIR CON ESTA ELECCIÓN?


El orden conductual del "zoológico" político nacional -y por ende del local-. En veces se torna perversamente coherente. Y aun entre las complejidades del sistema, hay un punto en el que se produce un hecho que, como un rayo, ilumina el derrotero que tomarán los acontecimientos, en el espacio futuro que se avecina.
Esto ha sucedido muchas veces. Recuerdo cuando fue designado el presidente del directorio municipal reformista, que de inmediato los mas avispados nos dimos cuenta que algo raro se cocía tras tal señalamiento. Bueno, pues lo mismo acaba de suceder con la elección del actual candidato a la alcaldía
 por esa misma organización, como nuevo presidente de la sala capitular del ayuntamiento local. Todo parece indicar que las negociaciones, en las altas esferas del partido, no contempla oficializar su candidatura y, por lo visto, seria el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) quien llevaría el candidato de la alianza con el apoyo de los jureles del Partido colorao y del partido oficial por supuesto.

De ser cierto todo esto, ¿cuales serian los escenarios posibles ante tal coyuntura? :

Bueno, aunque en política no deberían de haber enemigos, sino adversarios políticos, todos sabemos que en algunos casos, las enemistades trascienden ese plano, para situarse en lo meramente personal. Y aunque aparentemente anden juntos, no necesariamente estan reburujados.

Nos preguntamos entonces, sin animo de joder la paciencia ¿Cuantos peledeistas votarían por un candidato como el que se supone que llevaría la alianza? ¿Luego de verse sin la posibilidad de llevar un candidato propio, como es su justo anhelo? Pero igualmente ¿Cuantos de los reformistas que apoyan al candidato actual votarían por el actual incumbente? Las respuestas  son de todos conocidas.

Visto esto, tal parece que, si se concreta lo que sospechamos,se le abre, de par en par, una valiosa oportunidad para  un candidato opositor a la alianza. Siempre y cuando se sepan manejar dentro del "bestiario" político que nos gastamos.

Marino Santana